Desde el corazón vibrante de Barcelona, nace «La Ovella Negra». No somos solo un local, somos un refugio para aquellos que buscan reír, compartir y vivir momentos inolvidables. Desde nuestros primeros días, hemos sido testigos de encuentros inesperados, de risas contagiosas y de brindis que sellan amistades para toda la vida.
Nuestro espacio es un testimonio de lo que representa Barcelona: una fusión de tradiciones y modernidad. Más que mesas y jarras, ofrecemos un cruce de culturas, un hervidero de emociones y, sobre todo, un punto de encuentro para almas que buscan algo genuino y auténtico. Aquí, cada esquina cuenta una historia, cada pared ha sido testigo de confidencias y cada visita es una oportunidad para escribir un nuevo capítulo en nuestra rica historia.